En las primeras horas de la tarde del jueves 28 de marzo se realizó en Astillero Naval Federico Contessi y Cía. SA, la botadura nro. 130 concretada con la entrega de un innovador buque pesquero denominado “LUCA SANTINO” para la firma Cabo Vírgenes SRL que tendrá asiento en Puerto Madryn.
Entre las autoridades presentes se encontraron el Diputado Nacional Guillermo Montenegro y el Ministro de la Producción de la Provincia de Buenos Aires, Dr. Javier Tizado. Ante un numeroso público se dio inició al acto con la entonación del Himno Nacional.
Posteriormente, Domingo Contessi leyó el mensaje en representación del Directorio del Astillero. Sus primeras palabras fueron de agradecimiento a todo el gran equipo del Astillero y a los subcontratistas por el esfuerzo realizado para culminar esta obra. También hubo un enfático reconocimiento a la empresa armadora por su espíritu innovador, ya que este barco fresquero doble cubierta llevará una máquina de hielo líquido que por primera vez se instala en un pesquero de la flota nacional. Y se le agradeció por haber confiado en el Astillero no solo para la construcción de este barco, sino también para otra unidad recientemente iniciada que luce en el interior de los galpones, los cuales están siendo ampliados en el marco de importantes inversiones que viene haciendo el Astillero.
Parte del discurso se refirió positivamente a la reciente sanción del DNU 145/2019 “introduce por primera vez un incentivo para el armador que elige renovar su barco por otro nuevo construido en el país. También reconoce que la Industria Naval es un eslabón clave en la cadena de valor de la pesca y que en la Argentina existen capacidades relevantes para la construcción de buques de calidad. La misma norma fija por primera vez un tope para la vida útil de los barcos.”
Y por último trazó un panorama de cara al futuro:»Estamos a las puertas de un potencial resurgimiento de la Industria Naval de la mano de la pesca. Todos los astilleros del país nos sentimos comprometidos con este objetivo y dispuestos a invertir para estar a la altura de las circunstancias. Pero también sabemos que hay sectores que pujan por una rebaja arancelaria para la importación de determinados segmentos de buques nuevos y usados. En la letra chica de esa medida, en una segmentación que no excluya a barcos como el de 40 metros que está en construcción dentro de nuestros galpones y en las excepciones absolutamente innecesarias a la normativa vigente, podría irse por la borda todo lo bueno que se ha hecho en estos últimos meses. Esperemos que prime la voluntad de seguir generando empleos genuinos y de calidad.”
El momento más esperado de la ceremonia llegó cuando la madrina, Mariana Willatowski, estrelló la botella de champagna contra el flamante casco del barco y este se introdujo por primera vez en las aguas del Mar Argentino.