El alfajor marchiquitense se alza con el bronce en la categoría glaseado, destacando el talento local en el evento internacional.
En el reciente Campeonato Mundial del Alfajor, el alfajor Armandine D’Ozouville de Atlántida fue galardonado con el premio de bronce en la categoría glaseado, reafirmando la excelencia de los productos de Mar Chiquita.
El Campeonato Mundial del Alfajor se ha convertido en un evento emblemático que reúne a los mejores exponentes de este dulce argentino. En su última edición, celebrada recientemente, el alfajor Armandine D’Ozouville, elaborado en la localidad de Atlántida, se destacó al obtener el premio de bronce en la categoría glaseado. Este reconocimiento subraya la calidad y la dedicación de los productores locales.
Susana López Araya, cofundadora de Armandine D’Ozouville, expresó su satisfacción por el logro alcanzado. “Es muchísimo esfuerzo moverse hasta allá con la familia, la estructura, la mercadería, y cuando pasan estas cosas la alegría te desborda y te impulsa a seguir con todo”, comentó, reflejando el compromiso y la pasión que caracteriza a los artesanos del alfajor.
Además de Armandine D’Ozouville, el evento también contó con la participación de Dulce Cobo de Mar de Cobo, quienes habían sido ganadores en la edición anterior. Este año, la competencia fue reñida, pero el talento de los alfajoreros marchiquitenses se volvió a poner de manifiesto.
La obtención del premio no solo celebra la excelencia culinaria de Mar Chiquita, sino que también resalta la importancia de la tradición y la cultura del alfajor en Argentina, un símbolo que une a generaciones y regiones del país.
NMDQ