La compañía petrolera líder en Argentina anuncia un incremento del 10% en sus naftas y gasoil, generando preocupación entre los conductores y empresarios.
Mar del Plata se prepara para un nuevo aumento en el precio de los combustibles, ya que YPF, la principal compañía petrolera del país, ha anunciado un incremento del 10% en el costo de sus naftas y gasoil a partir de este sábado. Esta suba se aplica en medio de la transición de gobierno y apenas unas semanas después del último aumento aplicado a principios de noviembre.
El ajuste en los precios de los combustibles es una noticia que afecta directamente el bolsillo de los conductores y empresarios que dependen del transporte para sus actividades diarias. Aunque la compañía aún no ha proporcionado cifras oficiales sobre los nuevos valores, se espera que el litro de nafta súper en Mar del Plata se venda a $381, el de nafta Infinia a $475, Infinia Diesel a $578, y el GNC a $219 el metro cúbico.
Cabe destacar que los precios de los combustibles en Mar del Plata suelen ser más elevados que en la Ciudad de Buenos Aires. Esto se debe a diversos factores, como los costos de transporte y distribución en la región.
Este nuevo aumento se suma al incremento anterior que se produjo a principios de noviembre, cuando se levantó el congelamiento de precios acordado con el Gobierno. En ese momento, la nafta súper de YPF en la Ciudad de Buenos Aires ascendió a $272, mientras que el gasoil súper alcanzó los $292.
La situación se vuelve aún más preocupante debido a la escasez de combustible que ha afectado a todo el país en las últimas semanas. Esta situación ha generado inquietud entre los conductores y empresarios, quienes se ven afectados por la falta de suministro y los constantes aumentos en los precios.
Es importante destacar que estos incrementos en el precio de los combustibles no solo impactan en los gastos diarios de los conductores, sino que también tienen repercusiones en la economía en general. El transporte de mercancías y la movilidad de las personas se ven afectados por estos aumentos, lo que puede derivar en un encarecimiento de otros productos y servicios.
En medio de este panorama, los consumidores buscan alternativas para minimizar el impacto en sus bolsillos. Algunos optan por utilizar medios de transporte público, compartir viajes o buscar opciones más eficientes en términos de consumo de combustible.
Asimismo, este nuevo aumento en el precio de los combustibles genera incertidumbre sobre la política energética del país. La privatización de YPF ha sido mencionada como una posibilidad por parte del presidente electo Javier Milei, quien ha expresado su intención de transferir al sector privado todas las empresas estatales que sea posible.
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