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Mar del Plata, 17 de abril de 2024 – En un hecho increíble que podría haber terminado de manera trágica, el dueño de un kiosco ubicado en el barrio Peralta Ramos Oeste de Mar del Plata logró salvar su vida milagrosamente durante un violento intento de asalto perpetrado por dos delincuentes el pasado lunes por la tarde.
Según la información proporcionada por las autoridades, aproximadamente a las 14:00 horas, dos sujetos con los rostros cubiertos ingresaron al local comercial y rodearon al kiosquero, identificado como Cristian A., de 42 años. Los asaltantes, armados, le exigieron al comerciante que les entregara todo el dinero de la recaudación del día.
Lejos de someterse ante la amenaza, el rápido accionar del kiosquero logró evitar que resultara herido de gravedad. Cuando los delincuentes le exigieron la entrega del dinero, Cristian reaccionó utilizando un aerosol de gas pimienta para defenderse.
En ese preciso momento, uno de los asaltantes, enfurecido, sacó un arma de fuego y efectuó dos disparos en dirección al comerciante. Por un verdadero golpe de suerte, el primer proyectil impactó en un paquete de chicles Topline que se encontraba sobre el mostrador, evitando que alcanzara al kiosquero.
«Fue una situación realmente aterradora. Cuando me apuntaron con el arma, pensé que no la iba a contar», relató posteriormente el comerciante, todavía conmocionado por los hechos.
Tras los disparos, los delincuentes huyeron del lugar sin lograr concretar su cometido. Cristian activó rápidamente el botón antipánico que tenía instalado en su negocio, el cual no funcionó. Afortunadamente una vecina llamó al 911.
Personal de la Comisaría Tercera de la zona llegó al sitio y tomó intervención en el caso, que quedó bajo la órbita del fiscal Fernando Berlingeri. Los investigadores analizan las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del local con el objetivo de identificar a los sospechosos.
Lamentablemente, este no es el primer episodio delictivo que sufre Cristian en su kiosco. Según indicó, su establecimiento ha sido víctima de al menos seis robos en lo que va del año 2024. «La falta de seguridad en esta cuadra es realmente preocupante. Vivo con miedo de que entren a robarme de nuevo», expresó el comerciante.
A pesar del susto y de los daños materiales, el kiosquero se encuentra bien de salud física. No obstante, el traumático episodio vivido seguramente dejará secuelas emocionales en él y en su negocio.
Las autoridades esperan poder dar pronto con los responsables de este nuevo hecho de violencia ocurrido en la ciudad balnearia, con el objetivo de evitar que otros comerciantes locales sean víctimas de situaciones similares.
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