«Sueño de una Noche de Verano» un clásico que llega a Mar del Plata

AFORO AGOTADO PARA EL ESTRENO
Sábado 16 de enero a las 20hs
En Teatro Hostel
Olavarria 2373 – Mar del Plata

La compañía internacional
Mirando al Sur Presenta
“Sueño de una noche de verano”
William Shakespeare (1595)

Este sábado es el estreno de un clásico teatral. Al aire libre en el Teatro Hostel, se presenta «Sueño de una Noche de Verano». Las entradas disponibles se consiguen por Alternativa o en la boletería del teatro (Olavarría 2373). Un elenco de 12 actores marplatenses con la dirección de Greta Risa de la compañía internacional «Mirando al Sur». Subirá a escena todos los sábados a las 20hs.

“Sueño de una noche de verano” es la más erótica de todas las obras de Shakespeare.

La Midsummer night es la noche del solsticio y del inicio del verano, es la noche de San Juan con sus rituales y su culto al fuego. Corresponde a las fiestas solares y paganas de todos los tiempos. En Latinoamérica, sería la noche del 21 o del 24 de diciembre.

Noche mágica, de tono carnavalesco, propicia a toda clase de hechos sobrenaturales y fantasías extrañas; es una fecha asociada a la fertilidad, a las ceremonias fálicas, a la sensualidad liberada y al erotismo desenfrenado.
Los seis mundos representados en la obra, interpelan diferentes estratos de conciencia entre tierra y cielo. Nosotros, como pasajeros de un ascensor hacia las alturas, visitaremos vertiginosamente cada piso, desde el más concreto hasta el más imaginario.

Recorreremos esta obra atravesando diferentes niveles de lectura, cada uno con sus energías, sus creencias y sus “cuerpos”.

Poco importará en qué sentido recorramos el camino. Puede ser de arriba hacia abajo o de abajo hacia arriba, aunque lo más certero sería hablar de un círculo sin fin…
Partiremos de la realidad para adentrarnos en lo más profundo del ensueño, o por el contrario, desde un sueño profundo, aceptaremos despertarnos en una nueva realidad, dónde quizás la verdad nos libere o incluso pueda hacernos reír de nosotros mismos.

Poco importa la trayectoria elegida, mientras asumamos que esta pieza nos lleva de un mundo al otro y aceptemos visitarlos todos.

Poco importa en qué mundo estemos o de qué lado preferiríamos estar, mientras reconozcamos que, en cualquier momento, alguna noche, durante algún sueño o en algún cálido verano, aunque sea por un breve instante y si sabemos prestar atención, los dos mundos siempre se pueden encontrar.

En esta ocasión, la Compañía Mirando al Sur, quiere proponer un espectáculo al aire libre, sobre tréteaux (caballetes medievales) de Commedia dell’arte, en un lenguaje popular y de teatro físico. Se trabaja sin escenografía y en una estética de «teatro pobre», completamente
asumida, al estilo clásico de las técnicas de Commedia originales. De esta manera, se pone el énfasis en el trabajo de interpretación actoral, grupal y coral, Estos lenguajes y esta estética elegidos, surgen de una reflexión sobre la situación actual que está atravesando todo el rubro de las artes escénicas y con la convicción de que para esta temporada de verano, es necesario seguir realizando montajes de un teatro de calidad y con exigencia interpretativa, para revalorizar la importancia del trabajo escénico, pero asumiendo visual y estéticamente la precariedad en la que se encuentra la profesión. Creemos que reconectarnos con la esencia del arte teatral y representativo del pasado, y con valores casi «medievales», es la postura pertinente para realizar espectáculos en estos tiempos.

No podemos negar que el hecho de abordar, en un diciembre 2020, a vísperas de un verano 2021, una obra de Shakespeare con 12 actores en escena, se aproxima a un estado de locura o de ensoñación. Somos conscientes que nuestra apuesta va más allá de la obra en sí misma y desborda la escena. Los límites que la propia obra nos propone atravesar, también debemos cruzarlos al afrontar el concepto mismo de tal proyecto elegido para esta época.
En un momento en que todo tendería a distanciarnos, a aislarnos y a mantenernos detrás de los límites virtuales de una realidad insoportable, tenemos el coraje y la osadía, o la locura y el ensueño creativo, de apostar a una unión esperanzadora. Así, nos sumergimos en la realidad de la escena y de los cuerpos, a través de una obra que nos habla de mundos fantásticos y nos permite explorar esa sutil línea, en la que la verdad y la escucha de lo oculto, pueden unirse.