
Foto: Google Maps – Intersección de Ayolas y Gardel, Mar del Plata
Hombre con extenso prontuario delictivo aparece asesinado de madrugada en el barrio José Hernández.
Un hombre de 31 años identificado como Jonatan Cuelli, con una abundante lista de antecedentes penales, fue hallado sin vida en la vía pública tras recibir una puñalada en el pecho en horas de la madrugada en el mencionado barrio de la ciudad.
Cuelli, residente en inmediaciones de las calles Ayolas y Carlos Gardel, acumulaba en su historia delictiva causas por robo doblemente agravado por el uso de arma de fuego, tentativa de robo calificado en grado de autor, infracción a la ley de estupefacientes con fines de comercialización, robo calificado en grado de tentativa, resistencia a la autoridad policial, lesiones leves hacia terceros y desobediencia judicial, entre otros cargos.
Fue el personal policial de la seccional 11°, realizando recorridas rutinarias por la zona, quienes se toparon con el cuerpo de Cuelli tirado en plena calle y con una herida sangrante en el pecho producto de la puñalada que finalmente le segó la vida. Tras el hallazgo, ocurrido aproximadamente a las 5 y media de la mañana, los uniformados solicitaron de inmediato una ambulancia para el traslado urgente de la víctima al nosocomio zonal más cercano.
Pese a los intentos médicos de reanimación, Cuelli ingresó sin signos vitales al Hospital Interzonal General de Agudos, certificándose allí su deceso producto de la afilada puñalada que recibiera en pleno tórax.
Tras tomar conocimiento de los hechos, la fiscal de turno Romina Díaz caratuló preliminarmente la causa como «homicidio» y ordenó el trabajo en el lugar de la Policía Científica, entre cuyas tareas se destacan el relevo de evidencias y huellas, la búsqueda de posibles testigos entre residentes de la cuadra y aledaños, el análisis de cámaras públicas y privadas en procura de imágenes que esclarezcan lo sucedido, y la realización de la pertinente autopsia al cadáver de Cuelli para determinar con exactitud día, hora y mecánica del fatal ataque.
Hasta el momento, no había trascendido la existencia de testigos presenciales ni de sospechosos identificados por la justicia o las fuerzas de seguridad intervinientes. Tampoco las cámaras de vigilancia analizadas hasta el momento habrían registrado imágenes relevantes para el avance de la pesquisa criminal. Esta falta de pistas sólidas complica y dilata la resolución del resonante caso.
NMDQ