El Papa Francisco ha dado su aprobación para la beatificación del cardenal argentino Eduardo Pironio, quien fuera obispo de Mar del Plata. Esta noticia ha sido recibida con gran entusiasmo en la comunidad católica, ya que Pironio fue reconocido por su destacada labor en la creación de las Jornadas Mundiales de la Juventud.
El Vaticano ha reconocido un milagro atribuido a Pironio, que tuvo lugar en 2006. Se trata de la curación sin explicación científica de Juan Manuel Franco, un bebé que se encontraba en coma profundo y que despertó luego de que sus padres rezaran a la figura del futuro beato. Tras una exhaustiva evaluación médica y teológica, la Santa Sede ha confirmado la intercesión de Pironio en este caso.
La ceremonia de beatificación se llevará a cabo en Luján, Argentina, antes de que termine el año. Uno de los invitados especiales será el cardenal español Fernando Vérgez Álzaga, quien fue secretario de Pironio durante 23 años y actualmente ocupa el cargo de titular de la Gobernación del Vaticano.
Eduardo Pironio, nacido en 1920 en la localidad bonaerense de 9 de Julio, dedicó su vida al servicio de la Iglesia. Fue ordenado sacerdote en 1943 y posteriormente consagrado obispo en 1964. Desarrolló una destacada labor como vicario en la diócesis de Mercedes, obispo auxiliar de La Plata y finalmente como obispo de Mar del Plata.
Su participación en el Concilio Vaticano II y su posterior ascenso a cardenal en 1976 lo convirtieron en una figura destacada de la Iglesia católica. Pironio fue reconocido por su compromiso con los jóvenes y su papel fundamental en la creación de las Jornadas Mundiales de la Juventud, un evento de gran importancia para la Iglesia que se celebra cada tres años con la participación del Papa.
Durante su vida, Pironio enfrentó dificultades y persecuciones. En la década de 1970, fue perseguido por la organización paramilitar argentina conocida como Triple A, que también asesinó a una de sus colaboradoras más cercanas, María del Carmen Maggi. A pesar de estos desafíos, Pironio siguió dedicado a su labor pastoral y a la promoción de los valores cristianos.
El reconocimiento de las «virtudes heroicas» de Pironio por parte del Papa en 2022 fue un paso importante hacia su beatificación. Ahora, con la aprobación de Francisco, el ex obispo de Mar del Plata se acerca aún más a los altares.
La beatificación de Eduardo Pironio es un acontecimiento de gran relevancia para la Iglesia católica en Argentina y en todo el mundo. Su legado como pastor, líder y promotor de la fe continúa inspirando a generaciones de creyentes. La ceremonia en Luján será un momento de celebración y reconocimiento a su vida y obra.
La figura de Eduardo Pironio se suma así a la lista de beatos y santos argentinos que han dejado una huella imborrable en la historia religiosa del país. Su ejemplo de servicio y entrega al prójimo perdurará en la memoria de los fieles y seguirá siendo un faro de inspiración para todos aquellos que buscan vivir de acuerdo con los principios cristianos.
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