Recordando al querido ‘Negro’ Olmedo a 35 años de la tragedia en Mar del Plata

Hace 35 años, el humorista argentino Alberto Olmedo nos dejaba en un trágico accidente en Mar del Plata. El «Negro», como lo conocían sus fans, se había convertido en un ícono del humor en Argentina, con su estilo único de comedia y su habilidad para hacer reír a la gente. Hoy, recordamos su vida y su legado con emoción y gratitud por todo lo que nos dejó.

Nacido el 24 de agosto de 1933 en Rosario, Argentina, Olmedo comenzó su carrera en la década de 1950 como actor de teatro. A principios de la década de 1960, se trasladó a Buenos Aires y comenzó a trabajar en televisión, donde se convirtió en una de las principales figuras del humor en el país.

Con su estilo irreverente y su sentido del humor auténtico, Olmedo se convirtió en uno de los humoristas más queridos de Argentina. Sus personajes, como «El Manosanta» y «Borges y Álvarez» junto a Javier Portales, se hicieron muy populares y se convirtieron en íconos de la cultura argentina.

Pero Olmedo no solo fue un comediante brillante, también fue un actor talentoso y un artista versátil. Actuó en más de 50 películas y participó en numerosos programas de televisión y obras de teatro. Sus papeles en películas como «Los caballeros de la cama redonda», «Los reyes del sablazo» y «Rambito y Rambón, primera misión» se convirtieron en clásicos del cine argentino.

Pero fue su asociación con su compañero de toda la vida, Jorge Porcel, lo que realmente lo catapultó a la fama. Juntos, crearon algunos de los programas de televisión y películas más exitosos de la historia de la comedia argentina. Su química en pantalla era única y su humor, aunque a veces irreverente, siempre era auténtico y divertido.

A pesar de su éxito, la vida de Olmedo no fue siempre fácil. Luchó con problemas personales y adicciones a lo largo de su carrera, lo que a menudo afectó su salud y su trabajo. Pero a pesar de sus luchas, nunca perdió su pasión por la comedia y su amor por su público.

El 5 de marzo de 1988, el humorista argentino Alberto Olmedo falleció trágicamente en Mar del Plata, tras caer desde el balcón de su departamento en el piso 11 del edificio Maral 39. Su trágico final conmocionó a toda Argentina. La noticia de su muerte se extendió rápidamente y sus fans de todo el país lloraron su pérdida. La tragedia dejó un vacío en el mundo de la comedia argentina, y sus fans nunca lo olvidarán.

A pesar de que se plantearon diversas hipótesis acerca de la muerte de Olmedo, la versión oficial es que se encontraba bajo los efectos del alcohol y/o drogas, y que mientras jugaba en el balcón perdió el equilibrio y cayó. Su pareja en ese momento, Nancy Herrera, fue quien lo sostenía de las muñecas, pero no pudo evitar su caída. El cómico tenía 54 años.

Pero aunque ya no esté con nosotros, su legado sigue vivo. Su humor auténtico y su habilidad para hacer reír a la gente siguen inspirando a los comediantes de hoy en día. Su influencia en la cultura popular argentina es innegable y su nombre seguirá siendo recordado con cariño por generaciones venideras.

Como dijo una vez, «¿Qué quiero que quede de mí? Una estatua a mis manos en la calle Corrientes para que miren y digan: ‘Chau, Negro’. Nada más.» Pero su legado es mucho más que eso. Su humor y su autenticidad continúan y su presencia se siente en cada risa que provoca.

Gracias, «Negro» querido por todo lo que nos diste. Descansa en paz sabiendo que nunca serás olvidado.

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