Mar del Plata, una ciudad reconocida por su belleza costera y su vibrante escena cultural, ha sido testigo de un valioso legado artístico dejado por el renombrado artista colombiano Fernando Botero. La reciente muerte de Botero ha generado conmoción en el mundo del arte, y su legado en esta ciudad costera argentina cobra especial relevancia.
15 de septiembre de 2023. Hoy es un día triste para el mundo del arte, ya que ha fallecido Fernando Botero, el reconocido artista colombiano. A los 91 años de edad, Botero dejó un legado imborrable con sus inconfundibles esculturas de figuras humanas voluminosas. Su hija, Lina Botero, afirmó que su padre tuvo una vida extraordinaria y que partió en el momento indicado. Botero fue un creador contemporáneo ampliamente reconocido a nivel mundial y su obra será recordada como una representación única de la sensualidad y el volumen. Su muerte deja un vacío en el mundo del arte, pero su legado perdurará para siempre. Descanse en paz, Fernando Botero.
En junio de 2013, la obra «La dama reclinada» fue donada al municipio de Mar del Plata por el titular del Multimedio La Capital SA, Aldrey Iglesias. Esta escultura, valuada en 900 mil dólares en ese momento, se convirtió en una pieza fundamental del patrimonio artístico y cultural de la ciudad. Dos años más tarde, en enero de 2015, la escultura fue emplazada en el acceso al Paseo de Compras del empresario donante, en medio de una polémica en el Paseo Aldrey.
Sin embargo, la ubicación de «La dama reclinada» generó controversias y debates en la comunidad marplatense. El gobierno de Carlos Arroyo, quien se desempeñaba como intendente en aquel momento, propuso cambiar su emplazamiento a la Plaza del Milenio, de acuerdo a una ordenanza municipal. A pesar de los esfuerzos del municipio por trasladar la escultura, la causa fue desestimada y la obra de Botero permanece en la plaza seca de Rawson y Las Heras, donde los visitantes pueden apreciarla en horario comercial.
La presencia de «La dama reclinada» en Mar del Plata no solo es un atractivo turístico, sino también un símbolo del reconocimiento universal de la obra de Botero. Esta escultura, junto con otra pieza del artista colombiano, «Torso masculino desnudo», ubicada en el Parque Thays de Buenos Aires desde 1994, demuestran la influencia y la importancia del legado artístico de Botero en Argentina.
La arquitectura del Centro Cultural Terminal Sur, donde se encuentra la escultura, contrasta con la propuesta modernista del paseo de compras de fachada neoindustrial. Para los amantes del arte, no recorrer el paseo de compras y no pasar por la plaza seca para fotografiar «La dama reclinada» es considerado un sacrilegio artístico.
La muerte de Fernando Botero ha generado un impacto significativo en la comunidad artística de Mar del Plata y en todo el mundo. Su legado perdurará a través de sus obras, que continúan inspirando y cautivando a quienes las contemplen. «La dama reclinada» se erige como un símbolo del arte y la cultura en la ciudad, recordando la genialidad y el talento de un artista colombiano reconocido como uno de los más grandes de todos los tiempos.
Mar del Plata, con su riqueza cultural y su compromiso con las artes, se enorgullece de albergar la obra de Botero y de preservar su legado para las generaciones futuras. Esta ciudad costera argentina se convierte así en un destino imperdible para los amantes del arte y los admiradores de la obra de un artista que ha dejado una huella imborrable en el mundo artístico internacional.
NMDQ – Foto: Marcelo Pérez Peláez