Una ONG, más de 500 voluntarios y el sector privado se unieron para el 17° festejo de CEFIL, que convocó a miles de familias en el Club Once Unidos. El evento, que se ha vuelto un clásico de la ciudad, incluyó espectáculos artísticos, juegos, y la entrega de más de 5.300 juguetes y golosinas.
Mar del Plata vibró este domingo al ritmo de la solidaridad y la alegría infantil. En un despliegue sin precedentes, la ONG CEFIL organizó el festejo del Día de la Niñez más multitudinario de la ciudad, convocando a 5.200 chicos y chicas en las instalaciones del Club Once Unidos. El evento, que celebra su 17° edición de forma ininterrumpida, se ha consolidado como un hito de la agenda social marplatense, demostrando el poder del trabajo en red y el compromiso con los sectores más vulnerables.
Desde bien temprano, una red logística meticulosamente planificada se puso en marcha. Un total de 134 puntos de salida, estratégicamente ubicados en clubes, comedores, merenderos, sociedades de fomento e instituciones religiosas de todo el Partido de General Pueyrredon, se convirtieron en centros de reunión desde donde miles de chicos fueron trasladados en micros hacia el estadio. La escena, según testigos, era de una notable organización y entusiasmo, con niños y niñas que, acompañados por sus familias, esperaban ansiosos para comenzar la jornada de celebración.

Un trabajo de dos décadas en los barrios
El encuentro contó con la participación de Rodolfo “Manino” Iriart, fundador de CEFIL y actual candidato a concejal por Sentido Común, quien destacó el origen y la trayectoria de la organización. “Hace más de 20 años que venimos trabajando en los barrios de la ciudad, acompañando a chicos y adolescentes. Este festejo es una muestra de nuestro compromiso con la infancia, porque queremos que cada niño y cada niña tenga la oportunidad de jugar, divertirse y soñar con un futuro mejor”, afirmó Iriart. Sus palabras resonaron entre los asistentes y voluntarios, reforzando la idea de que la iniciativa va más allá de un simple evento, siendo parte de un trabajo social sostenido en el tiempo.
Por su parte, el presidente de la ONG, Nahuel Robles, hizo hincapié en la importancia de generar momentos de esparcimiento y felicidad en un contexto económico y social complejo. “Estamos muy emocionados de poder llevar tanta alegría a miles de niños de nuestra ciudad y que este festejo no sea un día más, sabiendo la realidad que están atravesando. Sus sonrisas nos confirman nuestro compromiso diario por transformar la realidad”, declaró. La frase, cargada de emotividad, subraya la filosofía que impulsa a los más de 500 voluntarios que colaboraron en la organización de la jornada.
Un escenario de alegría y solidaridad
El club Once Unidos se transformó en un gran parque de diversiones. Los chicos disfrutaron de una variada oferta gastronómica con chocolatada, facturas, pizzetas y tortas. Además, participaron de múltiples actividades lúdicas y recreativas, desde juegos deportivos hasta talleres de maquillaje artístico. El plato fuerte fue la nutrida cartelera de espectáculos sobre el escenario principal, que incluyó a artistas locales como Liberanza, Universal UP, la Murga de Mentes Libres, entre otros. La presencia de la productora Vorterix y la FM 100.7 también añadió un toque de profesionalismo al evento, amplificando la difusión y el alcance de la celebración.
El punto culminante de la jornada solidaria fue la entrega de cerca de 5.300 juguetes y golosinas, resultado de una masiva campaña de donación que movilizó a 70 comercios y puntos de acopio en toda la ciudad. Esta cifra, que supera la cantidad de niños asistentes, garantiza que ningún chico se fuera a casa con las manos vacías y resalta la generosidad de la comunidad marplatense.
Un anhelo de expansión y una red de colaboradores
El éxito de la convocatoria llevó a los directivos de la ONG a expresar un ambicioso deseo: trasladar el festejo en futuras ediciones al Polideportivo Islas Malvinas. “Soñamos con un festejo en el Polideportivo Islas Malvinas para la Mar del Plata grande”, manifestaron, dejando en claro su intención de continuar creciendo y abarcando a más familias.
La magnitud del evento solo fue posible gracias a una extensa red de colaboración. La nota original lista un centenar de empresas e instituciones que contribuyeron con la causa, incluyendo grandes marcas como Coca Cola, Havanna y el Hospital Privado de Comunidad, así como instituciones locales y pequeñas empresas. Esta lista de agradecimientos, que abarca desde sindicatos hasta gimnasios y comercios de barrio, es una radiografía del esfuerzo mancomunado que hizo posible esta jornada memorable. La articulación entre la sociedad civil organizada, el sector privado y el trabajo voluntario se presenta, una vez más, como la clave para llevar adelante proyectos de gran escala que impactan positivamente en la vida de miles de niños.
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