En un trabajo en conjunto entre la Municipalidad de General Pueyrredon, la Subsecretaría de Inspección General, empresas de servicios públicos como EDEA, Camuzzi y OSSE, la Policía de Buenos Aires y la Secretaría de Seguridad municipal, se llevó a cabo la clausura de un local dedicado a la compra y venta de artículos metálicos, conocido como «chatarrera». El establecimiento se encontraba ubicado en la intersección de las calles Cerrito y Ortiz de Zárate.
Durante la inspección, se constató la presencia de cables pertenecientes a la empresa Edea, así como también se detectaron otros elementos como balanzas, herramientas de corte y estibas, los cuales fueron secuestrados por las autoridades.
El objetivo de este operativo conjunto es combatir el robo de cables y medidores, los cuales posteriormente son vendidos ilegalmente. Para ello, se contó con la participación de representantes de cada empresa de servicios, quienes verificaron la procedencia de las piezas encontradas y certificaron que pertenecían a sus respectivas áreas.
La Subsecretaría de Inspección General elaboró las actas correspondientes, ordenó el secuestro de los elementos y procedió a la clausura del local. En cuanto a la logística y organización del operativo, la Secretaría de Seguridad se encargó de coordinar las acciones, junto con la presencia de la Patrulla Municipal y la colaboración de la Policía de Buenos Aires. Además, las empresas Emsur y Emvial brindaron maquinaria y mano de obra para la remoción y decomiso de los elementos ilegalmente acopiados en el lugar.
Desde el Municipio se informó que este tipo de procedimientos forman parte de una operativa sistemática que busca combatir el problema desde el lado de la demanda y la oferta dispersa generada por robos aislados. Estos robos alimentan un mercado ilegal en el cual compradores sin escrúpulos encuentran su sustento. Es por esto que se busca no solo clausurar los establecimientos de compra y venta ilegal, sino también desarticular toda la cadena delictiva que está detrás de estos actos.
NMDQ