Un homenaje a los 44 héroes que continúan en patrulla eterna.
En un emotivo día para la historia naval de Argentina, se cumplen seis años desde la última zarpada del submarino ARA San Juan. Un recuerdo que evoca tanto el orgullo de su servicio como el dolor de su trágica desaparición. Este acontecimiento ha dejado una huella imborrable en el corazón de los argentinos y ha sido motivo de homenajes y reflexiones sobre la importancia de nuestros héroes y la necesidad de garantizar la seguridad de quienes defienden nuestra soberanía.
Fue el 8 de noviembre de 2017 cuando el ARA San Juan partió desde la Base Naval Ushuaia con 44 valientes tripulantes a bordo, en dirección al puerto de Mar del Plata. Sin embargo, esa zarpada marcó el inicio de una angustiante espera para sus familias y para todo el país. El último contacto con la Armada se registró apenas una semana después, el 15 de noviembre. Desde ese momento, la incertidumbre y la preocupación se apoderaron de todos, mientras se llevaban a cabo intensas operaciones de búsqueda en un mar azotado por un fuerte temporal.
Los días pasaron, y las esperanzas se desvanecieron. El 17 de noviembre de 2018, los restos del submarino fueron hallados a 597 kilómetros de la ciudad de Comodoro Rivadavia, sumergidos en las profundidades del océano Atlántico. Fue un golpe devastador para el país, pero también una muestra de unidad y solidaridad en los momentos más difíciles.
En este sexto aniversario, desde el Instituto de Ayuda Financiera para Pago de Retiros y Pensiones Militares, órgano dependiente del Ministerio de Defensa, se rinde homenaje a los «44 héroes que continúan en patrulla eterna». Sus nombres y rostros siguen vivos en la memoria colectiva de Argentina, recordándonos su valentía y sacrificio en defensa de nuestra soberanía. Es importante mantener viva la llama de su legado y honrar su memoria.
Este triste episodio también ha dejado enseñanzas y ha impulsado cambios en los protocolos de seguridad y búsqueda en el mar. Es fundamental aprender de los errores y asegurar que situaciones similares no vuelvan a repetirse. La seguridad de nuestros marinos y la protección de nuestras aguas deben ser prioridades fundamentales para el Estado argentino.
A lo largo de estos seis años, el pueblo argentino ha demostrado su solidaridad y apoyo inquebrantable a las familias de los tripulantes del ARA San Juan. Han surgido numerosas iniciativas y homenajes en todo el país para recordar su valentía y honrar su memoria. Estos gestos de amor y gratitud nos recuerdan que los héroes no se olvidan, que su legado perdura en cada uno de nosotros.
En este aniversario, es momento de reflexionar sobre la importancia de la soberanía y la defensa de nuestros recursos naturales. El ARA San Juan representa el compromiso y la valentía de todos aquellos que dedican sus vidas a proteger nuestra nación. Como sociedad, debemos valorar y reconocer su labor, así como exigir las condiciones adecuadas para su trabajo y seguridad.
Seis años después de su última zarpada, el ARA San Juan sigue siendo un símbolo de fuerza y coraje para todos los argentinos. Recordemos a los 44 héroes que navegan en la eternidad, mantengamos viva su memoria y trabajemos juntos para garantizar un futuro seguro y próspero para nuestra nación.
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