
El 1º de agosto de 1991 se produjo la nevada más intensa registrada en la historia de la ciudad feliz, superando a las de 1964, 1972 y 1975. Durante aquel día, se registraron en promedio 8,5 centímetros, aunque en algunos sectores de la ciudad llegó hasta los 20 y se llegaron a hacer muñecos de nieve.
A 32 años del ese momento te proponemos revivir algunas de las imágenes captadas por lo privilegiados que fueron testigos del fenómeno meteorológico.
Tal como lo relató en el recuerdo de la histórica nevada el periodista local Bruno Perrone «la historia comenzó a escribirse durante la tarde del 31 de julio, cuando alrededor de las 18 cayeron los primeros copos de nieve. Esto fue en aumento y, cerca de la medianoche, la ciudad comenzó a blanquearse. Desde las 0,20 y hasta las 9 la nevada fue copiosa».
Según informaba el Servicio Meteorológico Nacional, durante la madrugada, la sensación térmica alcanzó los veinte grados bajo cero. La mínina se registró a las 0,15 con -1º5 y la máxima fue la mínima del siglo, cuando a las 17 trepó a 3º7.
«Fue un día que quienes lo vivieron lo recuerdan según su experiencia. Muchos no fueron a trabajar o a estudiar para disfrutarlo, sabiendo que sería un fenómeno que no se extendería demasiado. Es por ello que en aquella oportunidad, fue declarado en la ciudad un “feriado popular”. La mayor parte de los establecimientos educativos decidieron no dictar clases por la conjunta voluntad de alumnos y docentes», relató oportunamente Perrone.
Para que nieve al lado del mar, es necesario que se cumplan varias condiciones. En primer lugar, debe haber una masa de aire frío y seco que se desplace desde el continente hacia el mar. Este aire frío seco puede provenir de regiones polares o de altas montañas cercanas a la costa.
En segundo lugar, la temperatura del agua del mar debe estar lo suficientemente baja para que el aire frío que se desplaza sobre ella se enfríe aún más. Esto puede ocurrir en invierno, cuando las temperaturas del agua están más bajas debido al clima frío.
Por último, la humedad del aire también es un factor importante. Si el aire es muy seco, es menos probable que se produzca nieve. Sin embargo, si hay suficiente humedad en el aire, el aire frío y seco puede condensarse en forma de nieve cuando entra en contacto con el aire húmedo sobre el mar.
En resumen, para que nieve al lado del mar se necesitan tres condiciones: la presencia de aire frío y seco, temperaturas del agua frías y suficiente humedad en el aire.
Todos los años recordamos esa fecha y deseamos que un fenómeno así vuelva a ocurrir. El contraste de la nieve con el mar es algo absolutamente maravilloso.
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Foto: Turismo Mar del Plata