
Según datos que trascendieron desde distintas organizaciones y, teniendo en cuenta las operaciones inmobiliarias registradas desde el inicio de la pandemia y sus sucesivos aislamientos, todo parece indicar que Mar del Plata fue, nuevamente, la elegida de la gente.
En el último año, personas de todas las profesiones, asistieron desde esta ciudad a sus respectivos empleos. Traductores, programadores, responsables de atención al público, diseñadores y una larga fila de etcéteras eligieron trabajar conectados con su labor, pero también conectados con la naturaleza.
Su proximidad geográfica al AMBA, su rápido y seguro acceso junto a la enorme y notable mejora en la calidad de vida, encienden en muchas personas, una deseada luz verde para cambiar de vida.
El home-office es el pasaporte
Las nuevas tecnologías, su aplicación en el ámbito laboral y la aceleración que produjo el aislamiento en su utilización masiva, acercaron a Mar del Plata a quienes solo la disfrutaban como destino turístico.
Quien trabaja feliz, trabaja mejor y cuando la previa al ingreso a la oficina, o el after office es sobre una tabla de surf, o el sol en el horizonte: no queda mucho para pensar.
Ventajas
Buena estructura en materia de salud.
Excelente oferta educativa en todos los niveles (Incluyendo su reconocida Universidad Nacional).
Conectividad ofertada por todas las prestadoras del país.
Menor densidad poblacional.
Aumento constante de proyectos habitacionales en lugares privilegiados.
Ausencia de los traumáticos embotellamientos.
Más espacio para estacionar vehículos.
Lugares de cercanía para disfrutar de esos vehículos en familia.
La indiscutible ventaja de ser una ciudad marítima.
Menor costo de vida en, prácticamente, todos los aspectos.
Conectividad terrestre y aérea con el resto del país en transporte público
… y una larga lista que para todos los argentinos se transforman en razones inapelables para iniciar una nueva vida.
Mar del Plata sabe, desde siempre, adaptarse al crecimiento poblacional repentino. Son conocidos sus veranos y sus fines de semana turísticos.
Ahora el desafío es otro: Ser la ciudad anfitriona (por calidad) de todos los que deseen vivir mejor.
Colegio de Martilleros y Corredores Públicos Departamento Judicial Mar del Plata